sábado, diciembre 22, 2007

Renovación de los banquillos en el fútbol argentino

Roberto Sensini, Guillermo Sanguinetti y Claudio Ubeda fueron presentados como entrenadores de Estudiantes, Gimnasia y Esgrima La Plata y Huracán; todos ex defensores, explicaron sus proyectos y las primeras sensaciones frente a los desafíos:



"Boquita" Sensini a Estudiantes de la Plata
Aunque el nerviosismo habrá estado por dentro, Roberto Néstor Sensini, de 41 años, asumió la presentación en Estudiantes con naturalidad. En el country de City Bell, junto con el presidente Eduardo Abadie, dejó algunos conceptos que definieron su método de trabajo, casi desconocido para el público argentino.

Hay mucha expectativa por la vuelta de Estudiantes a la Copa Libertadores. "El hincha, los jugadores, la dirigencia y el cuerpo técnico le damos mucha importancia a eso, pero también sabemos que hay otros objetivos importantes, como el torneo local. Quisiera seguir el camino de Simeone: llegar y salir campeón".


El "eterno" Sanguinetti mas tripero que nunca.
Más que nunca se trató de un regreso a casa. No puede definirse de otra manera la asunción del DT Guillermo Sanguinetti en Gimnasia y Esgrima La Plata, club en el que jugó durante doce años. Ahora, con la experiencia que cosechó como ayudante de campo de Gregorio Pérez, parece listo para afirmarse en otra función en el fútbol argentino.
"Claro que vuelvo al club con las mejores expectativas. Quiero que el equipo sea el de otros años y que esté en los primeros lugares. Voy a tratar de que siempre mantenga un orden, que sea agresivo y que maneje bien la pelota; quiero un conjunto con el que pueda ir al frente en todos los partidos. Para eso, necesito la ayuda de los jugadores", comentó.

Ubeda infla el "globo"
Claudio Ubeda abrazó la dirección técnica antes de lo pensado. La necesidad de Huracán pudo más y adelantó el retiro como futbolista, que estaba agendado para junio próximo. El presidente Carlos Babington lo convenció tras la controvertida renuncia de Osvaldo Ardiles y Ubeda, de 38 años, cambió sus funciones casi de un día para el otro.
Conoce bien al club, mucho más a sus ex compañeros. "El retiro lo venía asimilando desde hacía tiempo. Se dio rápido: me tentó el gran desafío que me propuso Huracán. Quiero hacer las cosas bien para que el club siga creciendo en el aspecto deportivo y en la infraestructura. Me sentía muy cómodo en el club como futbolista y esto no estaba en mis papeles, pero lo charlé mucho con mi familia y mis amigos", dijo.

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